Ingredientes:
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1000 gr.
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Fresas silvestres limpias y sin rabillo
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750 gr.
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Azúcar
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250 ml.
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Vodka
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Elaboración:
Si no tenemos fresas silvestres podemos
utilizar fresas de cultivo, si son grandes las partiremos por la mitad. Se
colocan en un bol por capas la fruta y el azúcar, procurando que la primera y
la ultima sean de azúcar, y a continuación se riegan con el vodka, se tapa con
un paño y se deja reposar durante 12 horas. Se cuela el liquido, resultante de
la maceración, y se echa en una olla apropiada. Se pone a fuego vivo hasta que
la mezcla hierva a borbotones. Se añade entonces las fresas y se deja que
vuelva a hervir 7 minutos, hasta que tome el punto de solidez dureza. Esta
confitura es más fluida que las demás, si la queremos más espesa, herviremos
mas rato el liquido resultante de la maceración antes de incorporar la fruta.
Se aparta la olla del fuego y se deja
reposar varios minutos. Después del breve reposo, se retira la espuma, si se ha
producido, y se vierte enseguida en tarros esterilizados y calientes, se
cierran herméticamente y se ponen al baño maría durante 15 minutos.
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